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Arquitectos: Måns Tham Arkitektkontor
- Área: 220 m²
- Año: 2022
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Fotografías:Staffan Andersson
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El refugio de esquí con forma de A está construido con A-frames prefabricados y ventanas de buhardilla curvadas. La forma triangular convierte la casa en una pequeña montaña en sí misma. A medida que la nieve se acumula en invierno, se difumina el borde entre el suelo y la casa. La casa está dibujada en detalle, tanto por dentro como por fuera, con muebles e interiores personalizados hechos para realzar la estructura en A.
La forma de tienda de campaña de una casa en A es tan básica y tradicional como puede ser. Por lo general solo tienen ventanas en los hastiales. Pero para una casa en A tan grande, los dormitorios son necesarios para permitir la entrada de luz al volumen de 25 metros de largo y para crear espacios útiles en el diminuto piso superior.
La casa está dividida en cinco secciones, de cinco metros cada una. Las secciones de los hastiales no tienen dormitorios para mantener la claridad visual de la forma del marco. Los dormitorios se reflejan asimétricamente en cada lado. La curva del techo del dormitorio hace que se alineen con la forma general de la casa. Las ventanas de los dormitorios parecen párpados o las ramas de los pinos centenarios de los alrededores. En el interior, el ritmo asimétrico de los dormitorios y los triángulos resulta en secuencias de habitaciones con carácter variado y sorprendente. (ver secciones)
La distribución incluye zonas sociales y un baño principal en la planta baja. Se han equilibrado cuidadosamente las largas líneas de visión y la variación entre las vistas acristaladas y el resguardado interior de madera. La chimenea está hecha a medida: un bloque monolítico con un espacio curvo inspirado en la aurora boreal y el fuego. Los ladrillos se esmaltan en una fábrica local. El sofá a medida de doce metros de largo abraza el amplio salón y la ventana panorámica hacia el bosque.
El objetivo era darle al nivel de entrada un flujo libre con puertas correderas ocultas que hacen que todas las habitaciones, incluido el spa, sean parte del mismo movimiento y del mismo espacio. La entrada en la dura fachada norte funciona como una abertura de cámara con vistas completamente acristaladas directamente a través del edificio hacia las montañas al otro lado del valle. El rellano de la entrada, de cinco metros de ancho, cuenta con un guardaesquís curvo que acentúa el movimiento hacia el interior de la casa. Al sur de la zona de entrada hay una terraza hundida con bañera de hidromasaje.
El nivel superior tiene dos suites idénticas con 5 camas cada una y una habitación en forma de tienda de campaña. Una con sol de mañana y otra con luz de tarde. La escalera termina en un pequeño nicho superior con techo curvo que sigue la forma del ático.
